PIENSO QUE...

Era viernes, de esos viernes que esperas con tantas ganas que olvidas qué es lo que estás preparando. Todo se vuelve una carrera de fondo en la que das tanto al principio que cuando quedan pocos metros para la meta, ya estás jadeando y a punto de expirar.

El evento en cuestión era una celebración atrasada por el cumpleaños de mi amigo Antun, y debido al retraso en la celebración unimos dos cumpleaños más, el de Sara y el de Judit, por lo que entre tanta cosa que celebrar se nos olvidaron los pasteles, aunque sinceramente a nadie le importo.

En dos tandas nos reunimos todos en una casa rupestre en el pueblecito de Targasonne, aunque la casa tenía sauna y luces que se encendían con el movimiento, si fumabas en la planta baja la buhardilla se convertía en un cúmulo de niebla espesa con olor a camel, marlboro y un ligero toque de nobel.

Antun, nuestro dj indiscutible, trajo todo lo necesario para que en los dos días no nos faltará música, aunque de nada sirvió su VCI, ni los 6 altavoces, la minicadena fallecía a las 5:00 de la madrugada de la primera noche dejando una multitud de aprendices-pinchadiscos huérfanos.

.

ALLEZ!ALLEZ!

Joy Division con Isolation